1 ¡Qué bueno y qué tierno es
ver a esos hermanos vivir juntos!
2 Es como un aceite refinado
que desde su cabeza
desciende hasta la barba,
la barba de Aarón,
hasta el cuello de su túnica.
3 Es como un rocío del Hermón,
que baja sobre las montañas de Sión.
Allí el Señor otorgó su bendición,
la vida para siempre.
Este es otro salmo que se inspira en el espectáculo del templo, donde los levitas y los sacerdotes, «hijos de Aarón», celebran en conjunto el culto y entonan himnos de alabanza perpetua. Siempre se van a necesitar comunidades cristianas consagradas al servicio de Dios.